Se aconseja preparar el lugar donde se hará el rosario poniendo incienso de copal y mirra, una veladora blanca, un plato blanco con arroz y una copa o vaso con agua corriente.
Este rosario es una oración muy poderosa que nos acerca a nuestro Señor Dios todo poderoso por medio de nuestra Santísima y Benévola Niña Blanca. Cubre todo tipo de necesidades tanto universales e individuales, en el reino espiritual y de otras necesidades.
Es un poderoso medio de protección, defensa, salvación, liberación, y fortaleza. Un medio para glorificar a Dios por la Santa Muerte, la fuente de nuestra salvación. Al mismo tiempo a través de este rosario se aplican los méritos de la fe.
Antes de comenzar se recomienda hacer una petición personal, después la oración de apertura.
Este rosario se reza el primer día de cada mes.
Rosario de la santa muerte
Oración de Apertura:
Señor ante tu divina presencia, Dios Padre Todo Poderoso, Hijo y Espíritu Santo, te pido permiso para orar este santísimo rosario en honor a la Santa Muerte.
Por la señal de la santa cruz de nuestros enemigos, líbranos señor, Dios nuestro por la intercesión de nuestra amada madre la Santa Muerte, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
credo
Creo en un solo Dios, Padre todo poderoso, creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible,
creo en un solo señor Jesucristo, hijo único de Dios ,nacido del Padre, antes de todos los siglos, Dios de Dios,
Luz de luz, dios verdadero de Dios verdadero, engendrado no creado de la misma naturaleza del padre que por nosotros los hombres,
murió y por nuestra salvación bajo del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó en la Virgen María y se hizo hombre, y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilatos y fue sepultado y resucitó al tercer día según las escrituras y subió al cielo y está sentado a la derecha del Padre,
y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el hijo recibe la misma adoración y gloria y que habló por los profetas,
Creo en la iglesia que es una Santa Católica y Apostólica, confieso que hay un solo bautismo para perdón de los pecados espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amén.
Oración a la Santísima Muerte:
Ven divina Santa Muerte llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor. Envía tu espíritu y todo será creado y renovaras la faz de la tierra.
Oh Dios, quien enseñó los corazones de los fieles por medio de la Santísima Muerte, concédenos que por medio de ella misma, la Santísima y Divina Santa Muerte, seamos siempre verdaderamente sabios y que siempre gocemos de su consuelo.
Por nuestro Señor, Amen.
(Inclinando la Cabeza).
Todos:
Que la preciosísima Santa Muerte que surge de tu reino, el Templo de la Divina Sabiduría, Tabernáculo del Conocimiento Divino, Luz de la Tierra, nos cubra ahora y siempre. Amén.
L. ¡Oh! Preciosísima y Divinísima Santa Muerte.
R. Cura los rencores y envidias de todos nosotros tus fieles seguidores Santísima Muerte.
Padre Nuestro (Una vez):
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad aquí en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.
Ave María (Tres veces, en las cuentas):
Dios te salve, María, llena eres de gracia; el señor es contigo; bendita tu eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
L. Gloria Al Padre (Una vez):
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén.
Todos:
Que la preciosísima Santa Muerte que surge de tu reino el templo de la divina sabiduría, tabernáculo del conocimiento divino, y luz del cielo y de la tierra nos cubra ahora y siempre .Amen.
Primer Misterio:
Es entregada la Guadaña a nuestra Santísima Muerte
Oración:
Que por la majestuosa entrega en tu mano derecha de la Guadaña justiciera y a través de nuestro Señor Padre, ella salve a los pecadores del mundo entero y convierta muchas almas. Amén.
L. ¡Oh! Preciosísima y Divinísima Santa Muerte.
R. Cura los rencores y envidias de todos nosotros tus fieles seguidores Santísima Muerte. (Una vez).
Padre Nuestro (Una vez):
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad aquí en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.
Ave María (Una vez):
Dios te salve, María, llena eres de gracia; el señor es contigo; bendita tu eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
En las doce cuentas decir (Son doce cuentas no 10):
L. ¡Oh! Preciosísima y Divinísima Santa Muerte.
R. Sálvanos a nosotros y al mundo entero (12 veces).
L. Gloria Al Padre (Una vez):
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén.
(Inclinando la cabeza).
Santa Muerte mía, amada madre, bendita eres entre todos los seres y bendito el momento de mi comunión contigo, Amén. Amada madre intercede por nosotros tus hijos ahora y en la hora de nuestra muerte, Amén.
Gloria al padre al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio ahora y siempre, por los siglos de los siglos, Amén.
Santa Muerte amada madre en la vida y en la muerte ampáranos, Santa madre defiéndenos de nuestros enemigos y ampáranos ahora y en la hora de nuestra muerte, Amén.
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos, Amen.
Todos:
Que la preciosísima Santa Muerte que surge de tu reino el templo de la divina sabiduría, tabernáculo del conocimiento divino, y luz del cielo y de la tierra nos cubra ahora y siempre .Amen.
Segundo Misterio:
Recibe su Majestad la Santísima Muerte, en su mano izquierda el mundo entero, para cubrirlo con su manto piadoso y bondadoso (Pausa).
Oración:
Que por la divina voluntad del Señor Todopoderoso te hizo entrega del mundo entero para que cumplieras su voluntad y lo depositó en tu mano izquierda y a través de tu manto divino salves almas del purgatorio y protejas a los moribundos de los ataques de los espíritus infernales, Amén. (Una vez).
L. ¡Oh! Preciosísima y Divinísima Santa Muerte.
R. Sana a moribundos o cúbrelos con tu manto para quitarles el sufrimiento. Santísima Muerte apiádate de nosotros los mortales.
Padre Nuestro (Una vez):
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad aquí en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.
Ave María (Una vez):
Dios te salve, María, llena eres de gracia; el señor es contigo; bendita tu eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
L. ¡Oh! Preciosísima y Divinísima Santa Muerte.
R. Sálvanos a nosotros y al mundo entero (12 veces).
L. Gloria Al Padre (Una vez):
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén.
(Inclinando la cabeza).
Santa Muerte mía, amada madre, bendita eres entre todos los seres y bendito el momento de mi comunión contigo, Amén. Amada madre intercede por nosotros tus hijos ahora y en la hora de nuestra muerte, Amén.
Gloria al padre al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio ahora y siempre, por los siglos de los siglos, Amén.
Santa Muerte amada madre en la vida y en la muerte ampáranos, Santa madre defiéndenos de nuestros enemigos y ampáranos ahora y en la hora de nuestra muerte, Amén.
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos, Amen.
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Todos:
Que la preciosísima Santa Muerte que surge de tu reino el templo de la divina sabiduría, tabernáculo del conocimiento divino, y luz del cielo y de la tierra nos cubra ahora y siempre .Amen
Tercer Misterio:
Que la Balanza sea el equilibrio de nuestras vidas para que tengamos la tranquilidad necesaria en nuestra persona y recordar ser siempre justos. (Pausa).
Oración:
Que por la Balanza de equidad entre el bien y el mal florezca mas y mas este culto hacia ti mi niña bonita, mi niña blanca; agraciada eres por estar muy cerca de nuestro Señor Todopoderoso, Amen.
L. ¡Oh! Preciosísima y Divinísima Santa Muerte.
R. Sana a los mezquinos y mentirosos que en todo momento atacan tu maravilloso y divino culto, y cuando los llames a rendir cuentas ante nuestro Señor, apiádate de sus almas y perdónalos con ese don de sabiduría que solo tu posees, y que tu balanza logre el equilibrio espiritual para todos tus fervientes seguidores. (Una vez).
Padre Nuestro (Una vez):
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad aquí en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.
Ave María (Una vez):
Dios te salve, María, llena eres de gracia; el señor es contigo; bendita tu eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
En las doce cuentas decir (Son doce cuentas no 10):
L. ¡Oh! Preciosísima y Divinísima Santa Muerte.
R. Sálvanos a nosotros y al mundo entero (12 veces).
L. Gloria Al Padre (Una vez):
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén.
(Inclinando la cabeza).
Santa Muerte mía, amada madre, bendita eres entre todos los seres y bendito el momento de mi comunión contigo, Amén. Amada madre intercede por nosotros tus hijos ahora y en la hora de nuestra muerte, Amén.
Gloria al padre al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio ahora y siempre, por los siglos de los siglos, Amén.
Santa Muerte amada madre en la vida y en la muerte ampáranos, Santa madre defiéndenos de nuestros enemigos y ampáranos ahora y en la hora de nuestra muerte, Amén.
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos, Amen.
Todos:
Que la preciosísima Santa Muerte que surge de tu reino el templo de la divina sabiduría, tabernáculo del conocimiento divino, y luz del cielo y de la tierra nos cubra ahora y siempre .Amen.
Cuarto Misterio:
Los pies de la Santísima Muerte se posan en el mundo terrenal para ayudar a todos sus seguidores con su infinita bondad.
Oración:
Que por los preciosos pies que andan los lugares más escabrosos, nos proteja en todos nuestros caminos, de los planes y ataques, de los espíritus malos y de toda persona que nos busque hacer daño, Amén.
L. ¡Oh! Preciosísima y Divinísima Santa Muerte.
R. Sana con tu presencia las debilidades humanas. Santísima Muerte, tú, que eres piadosa elimina la miseria del mundo. ¡Oh! Santísima Muerte, con tu sombra divina acompáñanos, y no dejes que nadie nos haga ningún mal. (Una vez).
Padre Nuestro (Una vez):
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad aquí en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.
Ave María (Una vez):
Dios te salve, María, llena eres de gracia; el señor es contigo; bendita tu eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
En las doce cuentas decir (Son doce cuentas no 10):
L. ¡Oh! Preciosísima y Divinísima Santa Muerte.
R. Sálvanos a nosotros y al mundo entero (12 veces).
L. Gloria Al Padre (Una vez):
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén.
(Inclinando la cabeza).
Santa Muerte mía, amada madre, bendita eres entre todos los seres y bendito el momento de mi comunión contigo, Amén. Amada madre intercede por nosotros tus hijos ahora y en la hora de nuestra muerte, Amén.
Gloria al padre al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio ahora y siempre, por los siglos de los siglos, Amén.
Santa Muerte amada madre en la vida y en la muerte ampáranos, Santa madre defiéndenos de nuestros enemigos y ampáranos ahora y en la hora de nuestra muerte, Amén.
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos, Amen.
Todos:
Que la preciosísima Santa Muerte que surge de tu reino el templo de la divina sabiduría, tabernáculo del conocimiento divino, y luz del cielo y de la tierra nos cubra ahora y siempre .Amen.
Quinto Misterio:
La ventana que te comunica entre la vida y la muerte por donde tu entras y sales cada vez que nuestro Señor te envía a recoger un alma que la llama de su vida se extingue. Santísima Muerte, bendícenos y acompáñanos ante el señor. (Pausa).
Oración:
Que por la preciosa inmensidad que de la ventana al inframundo emane el resplandor que cure al enfermo, resucite al muerto solucione nuestros problemas presentes y nos enseñe el camino hacia nuestro Dios por la eterna gloria, Amén.
L. ¡Oh! Preciosísima y Divinísima Santa Muerte.
R. Eleva tu majestuosidad infinita para proteger a los débiles; da sabiduría, paciencia, amor, y paz, a todos tus fervientes seguidores. (Una vez).
Padre Nuestro (Una vez):
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad aquí en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.
Ave María (Una vez):
Dios te salve, María, llena eres de gracia; el señor es contigo; bendita tu eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
En las doce cuentas decir (Son doce cuentas no 10):
L. ¡Oh! Preciosísima y Divinísima Santa Muerte.
R. Sálvanos a nosotros y al mundo entero (12 veces).
L. Gloria Al Padre (Una vez):
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén.
(Inclinando la cabeza).
Santa Muerte mía, amada madre, bendita eres entre todos los seres y bendito el momento de mi comunión contigo, Amén. Amada madre intercede por nosotros tus hijos ahora y en la hora de nuestra muerte, Amén.
Gloria al padre al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio ahora y siempre, por los siglos de los siglos, Amén.
Santa Muerte amada madre en la vida y en la muerte ampáranos, Santa madre defiéndenos de nuestros enemigos y ampáranos ahora y en la hora de nuestra muerte, Amén.
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo como era en un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos, Amen.
Letanías a la Divina y a la Santa Muerte:
Señor ten piedad, Señor ten piedad.
Santísima Muerte ten piedad. Santísima Muerte ten piedad.
Santa Muerte escúchanos. Santa Muerte escúchanos.
Dios Padre del cielo, ten misericordia de nosotros.
Dios Hijo redentor del mundo, ten misericordia de nosotros.
Dios Espíritu Santo, ten misericordia de nosotros.
Santísima Muerte, ten misericordia de nosotros.
Santísima Muerte llena de santidad y de compasión, libéranos.
Santísima Muerte eterna alianza, libéranos.
Santísima Muerte armada de Dios, libéranos.
Santísima Muerte divina caridad, libéranos.
Santísima Muerte flagelo de demonios, libéranos.
Santísima Muerte ayuda de aquellos que están atados, libéranos.
Santísima muerte reina de tus devotos, libéranos.
Divina Santa Muerte fe verdadera, libéranos.
Santísima Muerte reina de la caridad, libéranos.
Santísima Muerte sanadora, sálvanos.
Santísima Muerte ungida, sálvanos.
Santísima Muerte fortaleza de los hijos de Dios, sálvanos.
Divina Santa Muerte comandante de tus guerreros, sálvanos.
Divina Santa Muerte acompañante de los ángeles del cielo, sálvanos.
Divina Santa Muerte consuelo de Dios Padre, sálvanos.
Santísima Muerte poder del Espíritu Santo, sálvanos.
Santísima Muerte circuncisión de los gentiles, sálvanos.
Santísima Muerte paz del mundo, sálvanos.
Santísima Muerte luz del cielo y de la tierra, sálvanos.
Divina Santa Muerte arco iris del cielo, sálvanos.
Santísima Muerte esperanza de los niños inocentes, sálvanos.
Santísima Muerte mundo de Dios, sálvanos.
Santísima Muerte divina sabiduría, sálvanos.
Divina Santa Muerte fundadora del mundo, sálvanos.
L. ¡Oh! Preciosísima y divinísima Santa Muerte, con tu manto protector.
R. Cúbrenos a nosotros y a todo el mundo.
L. ¡Oh! Preciosísima y divinísima Santa Muerte, con tu manto protector.
R. Limpia los pecados del mundo.
L. ¡Oh! Preciosísima y divinísima Santa Muerte, con tu manto protector.
R. Refina al mundo.
L. ¡Oh! Preciosísima y divinísima Santa Muerte, con tu manto protector.
R. Enséñanos como consolar y ser gratos a Dios.
Oración final
¡Oh! preciosísima y divinísima Santa Muerte nosotros creemos, esperamos y confiamos en ti.
Libera a todos aquellos que están en las manos de los espíritus infernales; nosotros te suplicamos, protege a los moribundos del trabajo de los espíritus malos y acógelos en la eterna gloria.
Ten misericordia del mundo entero y fortalécenos para alabar y consolar a nuestro Señor Todopoderoso.
Te adoramos, ¡Oh! preciosísima Santa Muerte llena de misericordia, Amén.
¡Oh! preciosísima y divinísima Santa Muerte, sana al mundo entero de la miseria y de maldades de nuestros prójimos. (Decir tres veces).
(Hacer su petición)
Padre Nuestro (Una vez):
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad aquí en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.
Vídeos de Rosario de la santa muerte
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